Reflejar la diversidad de la ciudad de Baltimore era mandatorio en una obra como Hairspray.

Siendo conscientes de nuestras limitaciones como compañía al ser todos los actores caucásicos, decidimos invertir un gran esfuerzo en reprensentar al colectivo afroamericano transformándonos no sólo físicamente, sino ahondando en la forma de ser y de expresarse de este grupo aún tan excluido en la sociedad de los 60.

Tratando de alejarnos del «blackface», caracterización simplista de la raza negra empleada durante mucho tiempo con fines ofensivos, hemos procurado plasmar con respeto el protagonismo que las personas negras merecían en un momento tan decisivo de su historia. ¡Esperamos que disfrutéis de nuestro soul!